¿Qué es el Autismo?

¿Qué es el Autismo?

El día 2 de abril se celebra en todo el mundo el Día Mundial de Conciencización sobre el Autismo, fecha cuando se busca informar a la sociedad sobre este padecimiento, y apoyar a los niños y sus familias para la inclusión social de los que lo presentan.

El autismo se conoce como tal desde hace más de un siglo. Actualmente se conoce como Trastorno del Espectro Autista, o TEA. Se cambió el nombre en 1988, porque los médicos se dieron cuenta que no había una serie de síntomas fijos y comunes a todos los pacientes, sino que cada quien podía tener algunos síntomas y otros no, siendo cada niño diferente.

Al final del artículo le sugerimos que puede hacer si sospecha que su niño tiene autismo.

El trastorno del espectro autista se puede sospechar desde antes de los 18 meses, y casi con seguridad antes de los 24 meses. Sin embargo, la mayoría, especialmente si no hay tanta discapacidad intelectual, permanece sin diagnóstico hasta los 3-5 años.

Que es el autismo
Autismo: Problemas para percibir y comunicarse con otros

Descripción del autismo

En general, el trastorno del espectro autista es un padecimiento del neurodesarrollo. Suele manifestarse en los primeros tres años de vida, y persiste toda la vida.

Se presenta en menos del 1% de los niños, aunque el riesgo sube al 5% si algún hermano tiene algún trastorno del espectro autista.

El trastorno del espectro autista es una nueva clasificación que incluye el autismo y algunas variedades, como síndrome de Rett o síndrome de Asperger, trastorno de desintegración infantil y el trastorno generalizado del desarrollo no especificado.

Manifestaciones

Un niño con autismo tiene problemas para percibir y comunicarse con otros, lo que afecta su aprendizaje, su conducta y como interactúa con los demás.

No utilizan el juego simbólico (jugar con una muñeca como si fuera real, por ejemplo), ni comparten intereses (como señalarle algo interesante a la mamá para que lo vea, o seguir con la mirada cuando alguien le señala algo).

Generalmente hay problemas del lenguaje, desde incapacidad para hablar hasta lenguaje fluido pero inadecuado o centrado exclusivamente en temas favoritos, sin importar el interés de la persona con quien platican. También tienen problemas para entender el lenguaje corporal, como guiños o señales con la mano, al igual que la expresión facial de emociones.

En ocasiones el trastorno del espectro autista puede notarse desde que la primera infancia: los bebés no miran a los ojos de los papás, no balbucean (“platican”) con ellos, sonríen poco y se interesan demasiado en algunos objetos específicos. En otras ocasiones, el niño se desarrolla normalmente el primer año de vida, presentando síntomas hasta los 18-24 meses de edad, cuando incluso puede perder algunas habilidades que ya tenía.

Entre las manifestaciones más comunes son los problemas para hablar con otras personas y para mirarlas a los ojos. Hay problemas para la interacción social. No entienden los simbolismos, las bromas o frases de doble sentido. Muchas veces no responden a su nombre.

Los niños con trastornos del espectro autista tienen mucha dificultad para jugar con otros niños, entender los sentimientos de otros o incluso los suyos propios. En muchas ocasiones esto hace que prefieran estar solos. Parecen estar “en su propio mundo”, son excesivamente independientes.

Otras manifestaciones

Muestran un gran interés por temas muy seleccionados, lo que los lleva a convertirse en expertos en dichos temas. Les gusta excesivamente alguna parte de un todo, como interesarse por la defensa de un coche, pero no por el coche en su totalidad. También les pueden atraer piezas en movimiento o con luces.

Muchas veces repiten frases una y otra vez (“ecolalia”, como si fuera un eco). Pueden tener comportamientos repetitivos que afectan su funcionamiento, como el balbuceo, girar, golpear su cabeza, aletear las manos o caminar de puntillas.

Les gusta mucho la rutina, y tienen mucha dificultad para tolerar cambios en la misma, lo que a veces ocasiona conflictos explosivos (rabietas) cuando se cambia.

Les gusta ordenar cosas, y toman grandes precauciones para que los objetos estén ordenados o acomodados exactamente de la manera que ellos quieren. Es muy frecuente que les guste formar o alinear sus juguetes.

Muchas veces tienen sensibilidad diferente. Pueden ser muy sensibles a ciertos ruidos u olores, y por otro lado no sentir dolor o el frío o calor tan fácilmente.

Causas

Este trastorno puede presentarse en cualquier nivel socioeconómico o en cualquier raza. Sin embargo, se ha observado una frecuencia cuatro veces mayor en niños en comparación a las niñas. Se desconoce qué porcentaje de esa diferencia es causado por problemas de diagnóstico en las niñas.

Algunas enfermedades pueden asociarse con el trastorno de espectro autista, como la epilepsia, el Síndrome de X frágil o la esclerosis tuberosa. Sin embargo, la mayoría de los niños no presentan estas enfermedades.

No se conocen las causas del trastorno del espectro autista. Todo indica que existen factores genéticos y también ambientales. Es importante aclarar que las condiciones de la crianza no influyen en la aparición del autismo.

Se ha observado una mayor frecuencia entre gemelos idénticos (en 30-90% de los casos ambos gemelos tienen algún nivel del trastorno, en lugar de menos del 1% como mencionábamos antes). Por otro lado, se están realizando estudios buscando asociación con medicamentos, infecciones (como rubeola durante el embarazo) o contaminantes como pesticidas o metales pesados.

Algunos estudios muestran cambios importantes en el desarrollo de ciertas áreas del cerebro, y se ha visto que estos trastornos son más frecuentes en los niños que nacieron prematuros.

Hace algún tiempo se llegó a pensar que las vacunas podían asociarse al autismo. Estudios más completos han demostrado que eso no es verdad, por lo que los niños pueden vacunarse sin problemas.

Diagnóstico

No existe un estudio de laboratorio que pueda detectar el autismo.

Existen diversas señales que hacen sospechar el diagnóstico. El NINDS menciona que a una edad temprana se incluyen:

  • no balbucear ni señalar a la edad de un año
  • pérdida del lenguaje o las habilidades sociales que ya tenía
  • no decir ninguna palabra a los 16 meses y no formar frases de dos palabras a los dos años
  • contacto visual inadecuado
  • no responder a su nombre
  • excesiva colocación en fila de juguetes o de objetos
  • no sonreír ni responder socialmente

En niños mayores puede verse:

  • deterioro de la capacidad para hacer amistad con sus compañeros
  • deterioro de la capacidad para iniciar o sostener una conversación con otros
  • falta o deterioro de juego imaginario y social
  • uso repetitivo o inusual del lenguaje
  • interés anormalmente intenso o enfocado
  • preocupación con ciertos objetos o temas
  • adherencia inflexible a las rutinas o a los rituales específicos

Hay que recalcar que cualquiera de estos datos de manera aislada puede verse en niños perfectamente sanos, por lo que sólo puede usarse esta lista como una referencia general.

El médico pediatra revisará periódicamente a su bebé, y si nota datos sugestivos de autismo realizará una evaluación más completa.

Detección y valoración

Una prueba útil para la detección temprana del autismo es el M-Chat-R (Lista de verificación Modificada para Autismo en Niños pequeños). La Academia Americana de Pediatría actualmente recomienda que se realice a todos los niños entre 18 y 24 meses de edad.

La valoración de un niños con trastorno del espectro autista es multidisciplinaria, e incluye al pediatra, el psicólogo, pedagogo y el neurólogo entre otros. También puede requerirse una valoración de audición, pues problemas en esta pueden ocasionar síntomas parecidos al autismo.

Tratamiento del Trastorno del Espectro Autista

Tratamiento del autismo
Puede apoyarse a los niños con autismo de muchas maneras

No hay un tratamiento específico para el autismo. Sin embargo, existen muchas terapias que pueden ayudar al niño a comunicarse, mejorar sus capacidades y alcanzar su plenitud. Mientras más pronto se inicien mejores serán los resultados. Por ello es importante el diagnóstico y tratamiento tempranos.

Medicamentos

Para tratar los problemas asociados, como ansiedad, depresión, trastornos obsesivo-convulsivos o convulsiones. También se pueden usar antipsicóticos en caso de problemas más intensos de comportamiento.

Terapias Educativas

Que le enseñan al niño a desarrollar su lenguaje y a comunicarse.

Terapias Conductuales

Que le enseñan a comportarse con otras personas, refuerzan las conductas positivas y desalientan las negativas.

Hay disponible en Internet un extenso artículo con recomendaciones sobre el uso seguro del Internet por los niños con trastornos del espectro autista.

Terapia familiar

Importante para apoyar a la familia a entender, convivir y apoyar al niño con trastorno del espectro autista. La comprensión de los padres es importantísima para el bienestar del niño con trastorno del espectro autista.

Es muy importante que los padres acepten al niño como es, y que no intenten forzarle a cambiar, por ejemplo, obligándolo a ir a jugar con otros niños cuando él/ella no quiere.

Es también útil planear su día, buscando detectar posibles cambios en la rutina que pudieran afectarle, y planeando estrategias para ayudarle a sobrellevarlos mejor.

Terapias alternativas

No han mostrado su utilidad de manera contundente otras terapias como la quelación, el oxígeno hiperbárico o las dietas especiales.

Complicaciones

Aunque disminuye mucho el riesgo con un tratamiento adecuado, algunos niños con trastornos del espectro autista desarrollan problemas laborales o escolares, aislamiento social, dependencia y trastornos psiquiátricos como ansiedad o depresión, entre otros.

Pronóstico

Cada niño con trastorno del espectro autista es diferente. En general muchos de ellos mejoran conforme crecen, especialmente con una terapia y con el apoyo familiar, pudiendo llegar a ser, especialmente en aquellos con menos síntomas, adultos con una vida normal o casi normal.

Factores de mal pronósticos pueden ser: no hablar coherentemente antes de los cinco años, y tener déficit intelectual.

Otros niños, sin embargo, pueden continuar con problemas importantes a lo largo de la vida, e incluso empeorar en la adolescencia, donde los cambios de la edad empeoran su comportamiento y estado emocional.

¿Que se puede hacer si se sospecha autismo?

Usted puede realizar la prueba de detección temprana que está disponible aquí, y solicitar evaluación aquí. También puede realizar preguntas generales en nuestro foro, o sacar una consulta directamente aquí.

1 Responses

  1. Muy buena explicación sobre el autismo. Tengo un hijo con autismo estoy desesperada. Gracias x darnos alternativas.

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